La unión hace la fuerza.

Sentir que puedes confiar en la gente que tienes a tu alrededor es fundamental, no sólo para avanzar, también para sentir seguridad en los pasos que vas dando.

Saber que puedes contar con su apoyo y que ellos pueden contar con el tuyo es una de las primeras bases de un buen equipo.

Y, aunque suene simple, no lo es tanto. Y no es algo que se adquiera haciendo un curso o atendiendo consejos fantásticos, ese concepto de confianza, esa forma de entender y empatizar con el resto de los que te rodean, tanto en el plano profesional como el personal, es algo que se adquiere y se cría y cuida con los años.

Saber que hay “otros” que puedan necesitar de algo que nosotros podemos hacer y que nos salga de dentro hacerlo, es algo fantástico. Recuerdo un anuncio de la televisión en el que un padre y una hija iban en un coche. Llegan a un paso de peatones y paran a dejar cruzar a un peatón. Éste, les agradece el gesto. Y la niña pregunta ¿Por qué nos da las gracias si es nuestra obligación?

Muchas veces cuando actuamos como debemos, no esperamos que nos lo agradezcan, sólo sabemos que lo estamos haciendo bien y que el agradecimiento lo sentimos por el simple hecho de saber que lo estamos haciendo bien, y que eso que hacemos, facilitará una labor posterior de alguien que encontrará más fácil llegar a la meta a la que deba llegar, por un simple detalle que no nos cuesta mucho y a quien viene detrás le ayuda.

Es una forma de hacer que empieza en casa. Es poner un rollo de papel higiénico nuevo cuando se ha acabado el anterior, es colocar una bolsa de basura nueva cuando retiras la vieja para bajarla al contenedor, son cosas que en ese momento nos suponen muy poco esfuerzo y que al que viene detrás le va a facilitar la labor.

Imagen de Filmbetrachter en Pixabay

Es querer formar parte de un equipo, es sentir la necesidad del otro y poder ayudar a reducir el esfuerzo, es pensar en lo demás cómo si fueran nosotros mismos.

Y esa forma de trabajar, es, como decía el militar norteamericano que he nombrado en otros artículos, algo que nos ayudara a completar de forma correcta nuestro día, es empezar haciendo la cama, es pensar en los próximos cinco minutos, no sólo en el ahora y en el yo. Es formar parte de algo mucho más grande, es ser nosotros y el futuro.

Es dar un paso esencial para ser parte de un equipo.

Es cuando el esfuerzo de dos hace el trabajo de tres.

La unión hace la fuerza
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